La adicción al Alcohol, se entiende como una de las más frecuentes y a su vez peligrosa, ya que el consumo de bebidas alcohólicas lo encontramos muy arraigado en nuestro día a día . Nos encontramos consumo al finalizar la jornada laboral, en eventos y reuniones familiares, cumpleaños, etc.
¿Cómo podemos identificar la adicción al alcohol?
Podemos identificar que el consumo se convierte en una adicción, cuando observamos graves problemas en la persona consumidora. Problemas en el rendimiento académico, profesional, problemas que afectan en las relaciones tanto familiares como sociales, alteraciones en la salud física y psíquica de esta o incluso llegar a ocasionar problemáticas en ámbitos legales y económicos.
La adicción al alcohol provoca una serie de comportamientos disfuncionales que progresivamente crean una distancia afectiva a sus seres queridos más cercanos.
Poco a poco adquieren un estilo de vida donde dan prioridad al seguir consumiendo a pesar de todas las consecuencias negativas que esto les conlleva.
El alcohol, es una droga, una substancia psicoactiva que interviene en nuestro funcionamiento cerebral. Su consumo reiterado y prolongado en el tiempo, es el que hará que se generen cambios neuroquímicos y neurofísicos que hacen que el consumidor/a, tome una conducta repetitiva de búsqueda para conseguir con inmediatez sus efectos y evitar así el malestar de no consumirlo.
La adicción al alcohol y sus factores de riesgo
También precisar que existen numerosos factores de riesgo que se suman en el desarrollo de la adicción, como una tendencia vulnerable de la personalidad de la persona, situaciones sociales y familiares complejas, malestar psicológico y permisividad del consumo.
Todos estos factores incrementan la posibilidad de aparecer una adicción al alcohol.
Pero la adicción al alcohol tiene muy buena respuesta cuando se realiza un tratamiento. Por la cual cosa es muy importante que el paciente o familiar consulten con un profesional o un centro especializado en adicciones todo aquello que le está sucediendo y con esto aclarar la relación con el consumo.
Por norma general, la intervención inicial de la mayoría de casos, ira dirigida a que el/la paciente adquiera consciencia de enfermedad y reconozca la necesidad de hacer un tratamiento.
Sintomatología por consumo de alcohol
El trastorno por consumo de alcohol puede ser leve, moderado, o grave, según la cantidad de síntomas que presente. Entre los signos y síntomas pueden encontrarse los siguientes:
- Incapacidad de limitar la cantidad de consumo
- Intentos o pensamientos no conseguidos, de reducir la cantidad de ingesta
- Deseo y mucha necesidad de ingerir bebidas alcohólicas.
- Incumplimiento de obligaciones en el ámbito laboral, académico en el hogar debido al ingesta reiterada de alcohol.
- Consumo aun cuando sabes que hay repercusión con problemas físicos, sociales o interpersonales.
- Consumo de alcohol en situaciones donde pones en riesgo la integridad personal y de terceros, como conducir o nadar estando bajo los efectos del consumo.
- Aislamiento en actividades de ocio, laborales y pasatiempos
- Ingesta de alcohol en situaciones donde se pone en riesgo la integridad física personal y de otros, como por ejemplo nadar o conducir.
- Necesaria la ingesta más abundante ya que se necesita más cantidad para sentir el efecto o se tiene un efecto reducido por la misma cantidad.
Factores de riesgo del consumo
La ingesta de alcohol puede empezar en la etapa de la adolescencia, aunque el trastorno del consumo de alcohol por regla general se manifiesta entre los 20 y 40 años, aunque la adicción se puede presentar en cualquiera de nuestras etapas.
Algunos de los factores de riesgo que encontramos son:
- Comenzar el consumo a una temprana edad
- Contar con factores genéticos debido a antecedentes familiares
- Antecedentes de problemas emocionales traumáticos
- Contar con factores sociales y culturales
El tratamiento para la adicción al alcohol
El tratamiento tendrá como objetivo general mantener y conseguir la abstinencia, prevención de recaídas, dar soporte a las relaciones socio familiares y abordar consecuencias físicas y psicológicas del consumo.
Se utilizan diferentes procedimientos que se podrán realizar de forma individual o grupal, como entrenar las habilidades sociales y de afrontamiento, intervenciones motivacionales en el grupo y técnicas de autocontrol.
En el tratamiento cobra mucha importancia el papel de parejas/familiares en terapias, para para que conozcan y colaboren en el proceso del paciente y estar al corriente de limitaciones o implicaciones que tiene el paciente de cara a reducir el riesgo de recaída.
La meta de cualquier tipo de tratamiento en adicciones es conseguir una abstinencia permanente, entendiendo la adición como una enfermedad crónica, es decir que un consumidor de alcohol, no puede retomar la ingesta moderada ya que al beber se encontrara con las mismas dificultades ocasionadas por pérdida de control sobre el consumo como anteriormente.
Ana Ces: Coordinadora de Programas Fundación Forum